Luis Hurtado Garcia
De un modesto matrimonio, compuesto por Galo Hurtado Crespo, natural de Colmenar de Oreja, y Ezequiela Garcia Gonzalez, natural de Villarejo de Salvanés, nació el 25 de Agosto de 1878, en el número 15 de la calle empedrada, el niño Luis Hurtado Garcia que, apenas mozalbete se ausentaría para siempre de su pueblo natal, atraído por una visita pastoral o misión, en unión de otros dos más de su edad que no tardaron en regresar, cancelando de esta forma su propósito de dedicarse a la vida religiosa y que en uno solo de ellos se mantuvo vivo y firme.
A los 16 años de edad, y después de pasar por el Colegio Apostólico de Talavera, llegó a Granada el Hermano coadjutor de la Compañía de Jesús, Luis Hurtado Garcia, y allí murió santamente, como había vivido, el día 2 de octubre de 1947 a los 69 años de edad y 53 de vida religiosa.
Sus primeros años en Granada transcurrieron como auxiliar valiosísimo de la labor científica desarrollada por los Padres de la Compañía en el Colegio que tienen en aquella capital para la formación de sus estudiantes.
En el año 1902 la Compañía de Jesús fundo en Granada el Observatorio de Cartuja y al parecer el hermano Hurtado contribuyó a esta creación y montaje del centro de una manera destacada, quedando a su cargo totalmente desde entonces la sección de Meteorología.
Fruto de su dilatada labor en Cartuja han sido diversos aparatos por el mismo construidos o diseñados y que en sus respectivas épocas han constituido verdaderos aciertos en la solución práctica, a la par que sencilla de los problemas del registro mecánico.
- “Pananemografo” Hurtado S.J. que registra con exactitud el tiempo que está soplando el viento en una dirección determinada; sus gráficos carecen de inscripciones falsas y parasitarias.
- "Radiotelelepter Hurtado S.J.” que es un receptor de telegrafía inalámbrica de galena construido en 1911, recibe despachos radiotelegráficos desde 1500 Km. Mediante este aparato Cartuja recibía, por ejemplo, de Greenwich su hora con precisión matemática y actualmente se conserva como una reliquia de valor inestimable.
- "Sinmeteoroscopo Hurtado, S. J." destinado a representar en conjunto el estado atmosférico de toda España.
También fueron obra suya otros aparatos reseñados en el artículo necrológico que le dedicó la Revista de Geofísica (tomo VII-1948).
- “Pluviógrafos” eléctricos para tres intensidades diferentes de lluvia con registro grafico
- “Anemógrafo” vertical de dos sentidos para las componentes verticales, ascendentes y descendentes.
- “Geotermógrafo” de tres profundidades, del que estaba hecho el tendido subterráneo de tres hilos metálicos de 15 metros de longitud cuando le sorprendió la muerte, si bien pudo alcanzar la satisfacción de ver sus primeras graficas de pruebas en cuyas curvas se obtuvo una ampliación de 4mm por grado centígrado.
En la prensa nacional, con frecuencia, y más de una vez en la extranjera tuvieron eco y resonancia estas ingeniosas realizaciones e inventos.
Otro de sus trabajos notables, que merecen traerse a colación, fue la paciente y escrupulosa recopilación de datos climatológicos de cada una de las provincias españolas y su detenido análisis, haciéndolos “sensibles” en un cuadro de 3,20 metros de lado, pintado al óleo, con cinco divisiones y en el que gráficos, números y colores, en armónico concierto, se pusieron a contribución para dar una visión de conjunto de la climatología de España, cuyo trabajo constituyó un éxito destacado en la Exposición de Sevilla de 1929, en la cual mereció detenida contemplación y elogiosas frases del Rey Alfonso XIII y otras personalidades, y, como colofón, Medalla de Oro, sustituida después con el Gran Premio, máximo galardón; despertando también el interés de muchos científicos que pidieron copias, ya que se consideró de utilidad y aplicación múltiple. En un pequeño libro que publicó en granada en el año 1941, titulado “El Clima de España”, quedaron condensados los valores medios de temperatura, viento, lluvia y estado del cielo de cada provincia, y por él podemos saber, por ejemplo, que Madrid, en cuanto al estado del cielo, tiene el año 123 días despejados, 186 nubosos, 56 cubiertos y 84 de lluvia con 406,9 mm.
También llevó a la exposición sevillana cuadros estadísticos sobre diversos meteoros del clima de Granada, producto de observaciones propias de 25 años consecutivos; por cierto, que esos datos, coleccionados en debida forma fueron los que presentó al público, en una publicación titulada “El Clima de Granada”, el que fue director del Observatorio de Cartuja durante los años en que estuvo incautado por el Gobierno de la Republica y reducido al paro forzoso el hermano Luis.
Con ocasión de la divulgación por la prensa de uno de sus inventos, el Ayuntamiento acordó el 15 de mayo de 1942 enviarle una efusiva felicitación, a la que contestó diciendo que se sentía como avergonzado al tener que dar las gracias por tomar en consideración cosa que tampoco merece, añadiendo: De todos modos, mucho lo agradezco; sobre todo porque veo en ello el deseo de esa Corporación y su dignísimo Alcalde de enaltecer a esa ciudad, donde nos honramos de haber nacido.
En el año 1944 tuvieron lugar sus bodas de oro en la Compañía, con ocasión de las cuales recibió numerosas felicitaciones de los granadinos, en cuyo era sumamente conocido, a las que sumó la suya el Ayuntamiento de Colmenar de Oreja, expresada en el acuerdo del día 18 de octubre de ese año, y también la prensa de Granada dedicándole el Ideal un cariñoso articulo que rotulaba así: Bodas de oro del hermano Luis Hurtado en la Compañía de Jesús. – Más de cuarenta años de labor en el Observatorio de cartuja. Ha inventado algunos aparatos y construyó el primer aparato de radio que hubo en Granada, reseñando a continuación su importante y extensa labor.
Por último, y para terminar estas breves notas sobre uno de los hijos ilustres de esta ciudad, quiero añadir que, cuando un paisano nuestro, muy enamorado por cierto de las cosas de su pueblo, Pedro Garcia Garcia, fue destinado a Granada, visitó en agosto de 1957 la Cartuja y dejó plasmadas en una carta sus impresiones personales algunas de las cuales se sintetizan a continuación.
Allí le dijeron que los telescopios fueron construidos en Alemania bajo su inspiración; que los tres sismógrafos mecánicos y cuatro fotográficos, dos y tres respectivamente, están construidos expresamente por él, pasando por ser los más precisos de Europa; que el montaje de todos los aparatos es obra exclusiva suya; que su nombre va unido íntimamente al Observatorio y en la Compañía es venerado como un prodigio de laboriosidad, despidiéndole con estas palabras: El hermano Hurtado ha sido indudablemente un gran benefactor de la humanidad y su nombre pasará para siempre a la posteridad.
Observatorio de Cartuja
Podemos decir que los albores de la investigación en el Observatorio, que aún no existía físicamente, fue el mandato del P. Provincial a los PP. Granero, Ramón Martínez y al Hermano Luis Hurtado para que se trasladaran a observar el eclipse de Sol que tendría lugar el 31 de mayo de 1900 y estudiaran el evento. Hay dos versiones del viaje, una que llegaron a Tobarra , la otra que recalaron en Totana , las dos coinciden en que estudiaron el eclipse . El P. Due nos relata el equipamiento empleado, que eran varios aparatos del gabinete de Física: un anteojo Secretan de 160 mm. De abertura y 2,3 m. de distancia focal, cámaras fotográficas, etc. A la vuelta del viaje y una vez en Granada, prepararon una Conferencia Científica a la que “acudió un ilustrado y selecto público”. Dicha conferencia tuvo lugar el 10 de junio del mismo año y en ella se utilizaron proyecciones y se presentó un material abundante. Podemos decir que de esta conferencia nace la fundación del Observatorio pues el estudiante jesuita P. Antonio Osborne ofreció destinar a ese fin parte de la “legítima familiar”; la idea del joven religioso fue que se construyera un centro como el que había en Georgetown, dirigido por el P. J.G. Hagen, o como el de Stonyhurst, dirigido por W. S. Sidgreaves. (Manuel ESPINAR y Juan de Dios MORCILLO)
Ya desde sus comienzos, en 1902, la Sección de Meteorología tiene entidad por sí misma, siendo el jefe de Meteorología el P. Ramón Martínez y su ayudante el H. Luis Hurtado.
El año 1925 marca un resurgimiento de las observaciones meteorológicas en el Observatorio, que toman gran auge respecto a la toma de datos, a la adquisición de nuevos instrumentos y la construcción de aparatos propios por parte del P. Luis Hurtado, a la realización de conferencias de divulgación científica, a las reformas y ampliaciones llevadas a cabo en el edificio y a la realización de trabajos de síntesis de tipo teórico y práctico
En el díptico de abril de 1925 se explican los dos nuevos instrumentos, aunque solamente se expone uno de ellos, construidos por el H. Hurtado, conocido ya en el mundo científico por la construcción del “Radiotelelepter” y del “Sinmetereóscopo”. El instrumento que diseña y construye para el Observatorio es una veleta eléctrica que permite obtener la dirección del viento con mayor sensibilidad y precisión que los usados hasta entonces, y que se denomina electro-anemógiro, y que tiene la ventaja añadida que el registrador puede estar muy lejos de la veleta.
En los dípticos se publican aspectos diversos como: una pequeña disertación de las oscilaciones barométricas de corto periodo y las discrepancias entre barógrafo Richard y el variográfo Brébeuf; el instrumento de construcción propia “hormanemógrafo Hurtado”, destinado a medir las “variaciones rápidas o ímpetus (sic)” del viento o un mapa mundial de curvas isodiastemáticas
El propio Sánchez Navarro publicó varios trabajos sobre observaciones astronómicas pero el verdadero investigador de la Meteorología fue el H. Luis Hurtado.